El otro día hablaba sobre los principios de la no-acción del taoísmo y hoy toca hablar sobre un tema que me sugirieron por una conversación que tuve hace tiempo. Ésta trataba sobre el Karma.
El término Karma significa acción, por lo tanto, estos dos términos, tanto el Karma como el principio de la no-acción (del taoísmo) vienen dados de la mano.
Yéndonos al grano y sin tratar de aburrir a nadie, el Karma no es más que la consecuencia de nuestras acciones. Si realizamos buenas acciones seremos bendecidos y si por el contrario realizamos malas acciones seremos castigados.
Esta ley deja a cada uno en su sitio, de este modo, viene a concluir un aspecto que siempre comento pero que en ocasiones parece duro reconocerlo: “Cada uno tiene lo que se merece”. Cuando lanzo esta provocación siempre hay quien me dice que hay gente que no merece la situación en la que está, a lo que yo les comento que ellos tienen unas circunstancias y ellos son responsables de sentirse bien o sentirse mal. Cada persona es dueña de sus emociones y no solo eso, es responsable de las mismas. Si no le gustan las circunstancias podrá cambiarlas, en el caso de que tenga la posibilidad y si no la tiene podrá elegir sentirse bien o sentirse mal.
Ya lo decía Buda: “El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional.”
Por último quisiera aclarar una pequeña cosa. En todo esto de la acción y la no acción me gustaría dejar las cosas claras. La no-acción no es dejar de actuar. Muchas veces nuestros grandes errores son producidos por dejar de hacer cosas que debíamos haber hecho. No por dejar de actuar estás haciendo lo correcto. La ausencia de acción no es la no-acción, esta ausencia de acción contribuye en ocasiones a estar yendo por el camino equivocado. A lo largo de la vida debemos reconocer qué es lo que debemos hacer y qué es lo que debemos evitar. Sólo así iremos por el camino de lo correcto, ese camino que no ofrece fricciones de ningún tipo y que no hace que nos lleguemos a sentir mal.
3 comentarios:
¿Cómo elijo cómo sentirme? En ocasiones me siento mal y no quiero sentirme así, pero me siento mal, y en absoluto cada uno tiene lo que se merece ni a favor ni en contra. Otra cosa es que una sucesión de decisiones te lleven a una situación, pero dudo mucho que nadie se merezca una enfermedad grave o un accidente.
Sé que causa mucha controversia eso de decir que cada uno tiene lo que se merece. Pero en esta vida nos topamos con cosas que se encuentran dentro de nuestro círculo de influencia ( en él están las cosas que podemos controlar) pero otras veces surgen situaciones que quedan fuera de este círculo. Es inutil preocuparnos por aquello que no podemos controlar, ¿De qué sirve? Pero sí podemos controlar nuestras emociones. Yo no digo que sea fácil, pero es posible.
En cuanto a "merecerse" una enfermedad grave... Las cosas suceden, ¿No lo merecemos? Bueno, es una situación que ha surgido, pero también una oportunidad para luchar.
Yo pienso que cada uno somos lo que queremos y tenemos lo que merecemos, otro tema sería las cosas externas que nos puedan pasar o suceder.
Yo soy lo que quiero, y lo que me merezco.
Igor
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