domingo, 5 de abril de 2009

We are savage


El Management de toda la vida nos ha conducido a creer que debemos constituir empresas que se caracterizan por disponer de una serie de servomecanismos que logran mantener a cada uno en su sitio haciendo lo que debe hacer para así optimizar beneficios.

Estos modelos que están basados en una lógica económica pura son modelos sesgados en los cuales sí que se obtiene rendimiento, pero también es cierto que se obtiene a un coste humano muy alto. Ello supone, a la larga, un desequilibrio que conduce a perder todo lo que habíamos ganado en etapas anteriores a una velocidad de vértigo.

Son muchos los que se sorprenden cuando les digo que no hace falta control de personas en las organizaciones, a lo que me suelen responder que si no existe el control de un jefe estricto la gente no hace lo que tiene que hacer, se escaquea y todo se va al traste. En el pensamiento clásico, las personas somos seres que buscan el interés propio y cuanto menos tengan que hacer en una empresa será mejor para ellos, total, a ellos les pagan lo que les pagan y eso es lo que les vale.

¿Por qué se piensa así? Pues simplemente porque las empresas tratan a las personas como inputs. Las personas se han gestionado (y no dirigido) a lo largo de los años como partes de un sistema pasivo en el cual un superior ordena y otro acata. Entonces es cuando se pierde toda identidad y las ganas de transformar ese espacio que les aporta un sueldo a final de mes pero que no les da ese algo más que todos buscamos para sentirnos satisfechos y seguros en un entorno social.

Debemos romper las empresas, tirar todas esas estructuras que nos paralizan y dejar que las cosas sucedan. Si tuviera que comparar cómo se gestiona una organización sostenible y que puede permanecer viva a largo plazo diría que debe hacerse del mismo modo que se hace en la jungla. A continuación doy unas claves para presentar esta jungla.

- Todos forman parte de un ecosistema. Hasta el más pequeño tiene algo que aportar.

- Cada uno tiene su objetivo particular sí, pero la libre interacción hace que los fuertes permanezcan y los débiles se pongan las pilas o finalmente deban dejar la jungla.

- La jungla es un sistema autoorganizado.

- La jungla es un ecosistema que debe mantenerse vivo, todos saben que si la jungla está en problemas, todos están en problemas.

- Las especies de la jungla deben cooperar y crear sinergias.

- A la larga tiende a aparecer un rey de la jungla, todos lo respetan puesto que está ahí porque se lo ha merecido y porque el conjunto lo ha elegido.

- Todos aprenden de todos.

- Si una especie causa problemas, el resto de especies se encarga de poner a esta especie en su sitio.

- Del mismo modo, si una especie necesita ayuda, el resto no dudará en aportar todo lo que esté en su mano.

- No es lo mismo pedir ayuda que necesitar ayuda.

- En ocasiones se dan situaciones violentas, en normal, estamos hablando de la jungla, y en la jungla existe tensión.

- Frente a los cambios del entorno, los animales de la jungla se adaptan rápidamente sin necesidad de grandes periodos de reestructuración.

Ésta es una teoría experimental que lanzo de primeras pero que tiene mucho sentido. Muchas veces se pueden aprender grandes cosas cuando vemos documentales de naturaleza. En definitiva, nosotros también somos animales. ¿No creéis que muchas veces olvidamos esto?

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